Ingenioso calendario, que me recuerda terriblemente al de burbujas, la satisfacción que da romper un cartoncito se asemeja al de explotar la burbuja. Vale 35 dólares y lo creó Robert Feyereisen.
Vía.
Ingenioso calendario, que me recuerda terriblemente al de burbujas, la satisfacción que da romper un cartoncito se asemeja al de explotar la burbuja. Vale 35 dólares y lo creó Robert Feyereisen.
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